miércoles, 28 de diciembre de 2016

Hacia una buena convivencia de aula a través del diálogo productivo

El objetivo de la educación viene a ser de permitir a todos y todas acceder a oportunidades de aprendizaje y desarrollo adecuadas. Sea que se lo realice en un aula o en un salón de clases, siempre será necesario ese vínculo social con el otro.
La base de una comunicación enriquecedora nos demuestra tres (3) aspectos fundamentales que se interrelacionan. Desde el aspecto de comunidad se tiene en cuenta la importancia de esa cercanía y relación con el medio social, así nuestras ideas son contrastadas y podemos recibir un reflejo de lo que expresamos. El conocimiento y el aspecto del razonamiento a mi modo de ver parten de esa misma relación en el medio. No podemos desarrollarnos alejados de él, pero la influencia que de él recibamos debe ser también razonada, cuestionada y adaptada a lo que nosotros somos.
Las experiencias de las cuales nos habla Michaels et al, sugieren un cambio no solo metodológico sino de convivencia dentro del aula. Con las advertencias de que expone en los diálogos de las experiencias vividas, da a conocer una realidad que se nos escapa, el de tender siempre a obtener distintos puntos de vista.
Lo que me queda de la lectura es eso. No trasladar verdades que creamos como contenido a los y las estudiantes, que sean ellos los que permitan que la realidad se muestre según sus necesidades y habilidades para encontrarla.


Referencia:

Michaels, S., O’Connor, M. C., Sohmer, R., & Resnick, L. (1992). Guided construction of knowledge in the classroom: Teacher, talk, task, and tools. The Reading Teacher, 46, 316–326.

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